“Talento” es el buen uso de la inteligencia que se demuestra eligiendo bien las metas y movilizando los conocimientos, las emociones y las destrezas ejecutivas necesarias para alcanzarlas, es decir, es una secuencia de buenas decisiones.
Las empresas que saben que fomentar el talento y la creatividad es fundamental, toman decisiones al respecto. Por ejemplo: Google y otras empresas, permiten a sus ingenieros que dediquen el 20% del tiempo a desarrollar ideas personales, fuera del trabajo corporativo. Prácticamente todas las buenas ideas de google han surgido de ese 20% de tiempo.
Por regla general los adolescentes están muy motivados para lo que les interesa. Lo que ocurre es que quizás no coincida con los que nosotros queremos.
Laura Dekker fue la más joven navegante en dar la vuelta al mundo en solitario. Tenía 14 años cuando zarpó.
Craig Kielburger con sólo 12 años descubrió que habían matado a Iqbal Masih, un niño pakistaní que luchaba contra la esclavitud infantil, y decidió reunir a once compañerios de clase para unirse a esa lucha. Fundó una organización llamada Free The Children.
Hay muchos niños y jóvenes en el mundo que se entregan en cosas increíbles. A los adultos nos toca observar sus talentos, sus inclinaciones, sus intereses, y darles oportunidades.